4 de Enero 2014.
REFUNDAR
O REINVENTAR EL SALVADOR (!?)
Jorge
A. Morales S./ Lic. En Relaciones Internacionales.
Todos y cada uno de los
salvadoreños sabemos donde nos aprietan los zapatos y como eso repercute en los
bolsillos.
La cantidad e intensidad
de situaciones que hoy, lo mismo que ayer, enfrenta la sociedad salvadoreña, se
ven agravados por la confrontación político – partidaria, que cada dia se torna
más virulenta, aunque quizá con menos carga ideológica, ya que prevalecen los
intereses de grupos y sectores cuestionando a candidatos y partidos, principalmente
en cuanto al origen o procedencia de los fondos de campaña.
La cuestión es que, aun
conociendo los problemas que requieren atención, la salida no consiste en seleccionar
un tema y hacer a un lado o postergar los demás, pues lo lógico y apropiado es encontrar
la fórmula, o más bien diseñar la estrategia requerida para abordarlos de
manera simultánea y obtener resultados exitosos.
Afortunadamente la
humanidad se encuentra hoy inmersa en una era de transparencia, como fuera anticipado
por nuestros ancestros, cuyos efectos se manifiestan a escala global, pese a que
algunos no lo perciben y otros por conveniencia prefieren no darse por
enterados de esa realidad.
No es casual que
gobiernos de reconocida influencia y poder en el ámbito internacional, se vean hoy
cuestionados y sometidos al escrutinio público por sus excesos y abuso de poder
en perjuicio de sus propios ciudadanos o de terceros, como los sonados casos de
espionaje o actos de corrupción contra los intereses estatales con amplias repercusiones,
de las que, como estamos presenciando, no está exento El Salvador.
Independientemente del
desenlace que tengan esos acontecimientos, que generalmente concluyen en estos
lares con sanciones morales, confiamos en que en esta ocasión y en adelante, la
justicia cumpla cabalmente el rol que le compete.
Entretanto, debería enfocarse
la atención en asuntos tanto o mas importantes como seria la modernización del
aparato estatal, con miras a establecer las condiciones óptimas para impulsar el
crecimiento económico y el potencial de desarrollo del pais, pues hoy por hoy,
a pesar de la creación de nuevas leyes como la recién aprobada Ley de Agilización
de Trámites, la lentitud y desidia con que se desempeñan algunas instituciones,
cuyas actividades son o deberían ser clave para estimular la inversión interna
y externa, deja mucho que desear, dando la impresión de que más bien el
propósito es desanimar a los potenciales inversionistas, pues aparte de trabajar
a desgano, encontramos funcionarios o empleados que desconocen hasta el tipo de
formularios que se deben presentar para determinado trámite, lo que pone de
manifiesto un total desinterés en sus obligaciones o peor aún la intención de
boicotear el trabajo institucional y/o proyectar una imagen negativa de la
actual administración. Aunque cabe señalar que hay honrosas excepciones.
A esto hay que agregar la
apatía o indiferencia con que se atiende al usuario y la falta de iniciativa
para buscarle solución a situaciones que con un poco de esfuerzo podrían resolverse.
Véase por ejemplo el caso de la renovación de un pasaporte en donde aparece un
homónimo del solicitante, es decir que existe otra persona con nombre y
apellido similar y que enfrenta problemas con la justicia.
En casos como este
bastaría consultar los archivos de la institución encargada de emitir el
documento para constatar si se trata o no de la misma persona, o bien echar
mano de la tecnología para consultar a las alcaldías o a las entidades que fuere
necesario, para constatar si se trata o no de la misma persona, a fin de facilitar
el trámite, si no de qué sirve entonces la exigencia de presentar partidas de
nacimiento originales y recientes y el DUI, que supone ser el código personal y
único de cada ciudadano.
Para superar esas deficiencias
conviene reorientar y fortalecer la educación y la cultura, pero sobre todo fomentar
la toma de conciencia de que es deber de todos contribuir en el proceso,
despojándose de esquemas egoístas o sectarios, pensando en hacer de nuestro
querido pais una patria justa y sólida de que nos sintamos genuinamente orgullosos
y que asegure a nuestros descendientes un futuro promisorio.
Lo procedente seria que
los distintos estratos y fuerzas vivas de la nación unifiquen criterios para la
adopción de un Contrato Social, destinado a refundar, o mejor aún a reinventar a
nuestro querido El Salvador, cultivando nuevas reglas de convivencia y consolidación
de los principios que deben regir el comportamiento ciudadano en sus relaciones
con los demás y con el Estado; implementar sin demora las reformas
administrativa, fiscal y laboral, a fin de superar el actual estado de cosas, disminuir
las tensiones y el estrés que abate a buena parte de nuestro pueblo y que lo mantiene
de mal carácter.
No quiero concluir sin
hacerle llegar a mis hermanos salvadoreños, donde quiera que se encuentren, un
fraternal saludo de navidad y mis augurios por un próspero y feliz año nuevo.
3 de Diciembre 2013.
DE PLATAFORMAS DE GOBIERNO Y PACTOS DE NACION.
Jorge A. Morales S. / Lic. En Relaciones Internacionales.
Desde que puedo recordar he conocido diversidad de planes, programas, plataformas y promesas de candidatos, que proliferan en cada campaña electoral, excepto cuando se ha presentado a elecciones un solo partido o cuando sin decir agua va, sus ocupantes han sido desalojados en frías madrugadas, más aun si han debido salir en piyama o en ropas menores, de “la casona”; lo mismo podría decirse de los pactos, acuerdos y arreglos sobre todo tipo de asuntos, lo cual confirma que la imaginación es el principal atributo de los políticos.
La Prensa Gráfica, en su edición del 2 de noviembre de 2013, publicó una nota informativa de cuyo texto se toman algunos párrafos:
“Las fórmulas presidenciales de ARENA, Unidad, PSP y FPS se comprometieron ayer a elaborar un acuerdo de nación, en los próximos meses, que será la guía para gobernar el país durante 2014 a 2044. El FMLN se excusó de participar por señalar que no ha sido tomado en cuenta en la formulación inicial de la agenda pese a que Gerson Martínez y Fabio Castillo figuran en el grupo promotor.”
Si bien el pacto o acuerdo propuesto por los partidos de derecha queda pendiente de elaboración, ya se ha anticipado su contenido: “El acuerdo incorporaría decisiones en varias temáticas: institucionalidad democrática, Estado de Derecho, seguridad, salud, educación, crecimiento económico, empleo, un acuerdo fiscal para darle sostenibilidad a las finanzas públicas y pensiones.”
Sin duda se trata de una interesante iniciativa y bueno sería que se concretara al menos parte de los propósitos enunciados.
Sucesivas encuestas realizadas en distintos momentos, con posterioridad a los acuerdos de paz, concluían que los principales problemas cuya solución proclama el pueblo salvadoreño, son: la situación económica, la delincuencia, la falta de atención social y la educación.
Los dos últimos temas señalados, han sido atendidos en alguna medida por la administración presente, aunque falta mucho por hacer.
Asi las cosas, lo prioritario seria la firme disposición de los candidatos por hacer suyas las demandas de la ciudadanía, que en términos generales siguen siendo las mismas de antes del conflicto, salvo la apertura democrática y la relativa atención brindada por el actual gobierno a los estratos de población de menores recursos.
La Consulta de Mayo de 2013, realizada por el Instituto Universitario de Opinión Pública de la Universidad Centroamericana “José Simeón Cañas”, bajo el título: Evaluación de los cuatro años de gobierno del presidente Funes, provee entre otros, los siguientes resultados:
En su opinión, ¿cuál es el principal problema que enfrenta actualmente El Salvador? según variables.
Delincuencia: 40.7%; Economía: 22.4%; Desempleo: 10.8%; Pobreza: 9.8%; Violencia: 8.1%; Maras: 4.6%; Mala política gubernamental, el gobierno / la política los políticos: 1.7%; Otras respuestas: 2.0%
Como se puede ver, lo único que cambia en la última encuesta, es el orden de importancia de los problemas planteados.
Los partidos políticos en la actual contienda incluyen en sus respectivas plataformas, con sus propias características, los mismos temas. En la Convencion del FMLN, celebrada el 21/10/2013, el candidato Salvador Sánchez Cerén indicó que los tres ejes principales del plan de gobierno de la fórmula presidencial serán: a) el empleo, b) la seguridad y c) la educación.
Esto nos lleva a concluir que los candidatos identificados con esas legítimas aspiraciones, que cuenten con la trayectoria y credibilidad necesaria, una probada disposición e interés por el bienestar del pueblo y confiando en la madurez alcanzada por nuestros compatriotas, serán los elegidos.
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